La policía tuvo conocimiento de la existencia de esta banda al conocer las supuestas presiones que recibió un industrial de Puente Genil (Córdoba), Francisco U.M., de 39 años, para que comprara una serie de cuadros de escaso valor artístico.

Los estafadores incitaron a su víctima para que vendiera las obras a un falso coleccionista de Madrid, también detenido en la operación policial.

L investigación se centró sobre Antonio R.B., que dirigía la venta de los cuadros y a quien le fueron requisados seis lienzos falsificados y de escaso interés cultural, con los que atraía el interés de sus víctimas.

Asimismo, la policía se incautó en el domicilio granadino de José Luis F.M. de cuarenta y un cuadros, algunos con firmas como Salana, Nicanor Piñoles y Solá, retablos religiosos, costumbristas y retratos, probablemente realizados en los siglos XVIII y XIX.

Las declaraciones de los dos etenidos apuntaron a la existencia de otros integrantes de la red, lo que posibilitó el arresto en Córdoba de Manuel P.L., Pedro M.S. y Manuela R.M., a quienes se les intervino un revólver del calibre 38, así como 28 lingotes falsos de oro y joyas de dudosa procedencia.

Estos lingotes de oro simulados podrían servir a los integrantes de la banda para cometer nuevas estafas, ya que las piezas tenían una sorprendente similitud con el auténtico metal precioso.

Los cuadros intervenidos están siendo etudiados por técnicos del Museo del Prado, para determinar su autenticidad y procedencia, ya que la policía cree que han sido robados en templos, pinacotecas y colecciones particulares.