La operación polcial, que comenzó el pasado mes de abril, se ha llevado a cabo en el Hostal Club Las Vegas de Córdoba y en el Club Los Santos de Lucena, en donde han sido arrestadas 23 mujeres de distintas nacionalidades, que eran explotadas en ambos locales y que desarrollaban su actividad en situación ilegal.

Según fuentes policiales, las mujeres eran captadas en sus países de origen por los integrantes de la organización, que se aprovechaban de su precaria situación económica, prometiéndoles un puesto de trabajo e España digno y bien remunerado.

La organización les gestionaba todos los pasaportes y pasajes. Una vez en España, eran despojadas de su bolsa de viaje y billetes de avión para impedirles el regreso a su país, trasladándolas a pisos de acogida en el extrarradio de Madrid a la espera de ser definitivamente instaladas en los clubes de alterne.

Estas mujeres, a cambio de ser trasladadas a nuestro país, adquirían deudas con la organización de cerca de un millón de pesetas, que tenían que devolver a centa de los servicios sexuales que prestaban. Una parte de la cantidad que cobraban a los clientes era para la organización, además de pagar en concepto de alojamiento 7.000 pesetas diarias.

Las razones por las que las mujeres no denunciaban su situación son, además de los compromisos económicos que sus familias han adquirido en sus propios países para enviarlas, las amenazas con ser denunciadas y expulsadas a su país de origen.