Dos de los detenidos regentaban un locutorio situado en la calle Camino Viejo de Leganés, desde donde mandaban grandes cantidades de dinero. En el registro del locutorio y de una vivienda utilizada por los miembros de la banda los agentes intervinieron 107.582 euros.

La policía intervino tras detectar cambios de divisas por valor de 140.000 euros. La organización utilizaba a terceras personas (testaferrs) para el envío de dinero mediante transferencias, que se realizaban desde el locutorio.