La organización criminal estaba compuesta por ciudadanos alemanes y españoles que se abastecían de la droga en Madrid y la introducían en la isla adherida al cuerpo de una de las integrantes del grupo, que hacía de "mula". La droga era distribuida después a través de pequeños traficantes.

La operación ha sido realizada por el Grupo Especial contra el Crimen Organizado (Greco) de Ibiza, y la Brigada Central de Estupefacientes, ambos de la Comisaría General de Policía Judicial, junto con agentes de la Comisaría Local de Ibiza.

La investigación comenzó el pasado mes de febrero cuando los agentes del Greco detectaron a varios ciudadanos alemanes, asentados en la isla, que mantenían frecuentes contactos con distribuidores de heroína.

Los agentes pudieron comprobar cómo los investigados, además, se desplazaban periódicamente a Madrid. Realizaban los viajes una vez al mes y, al parecer, los aprovechaban para abastecerse de una notoria cantidad de estupefaciente.

La Policía ha intervenido, además de la droga, diversas piezas de una pistola del calibre 9 milímetros parabellum y seis armas blancas.