Los parlamentarios "abertzales" Patxi Zabaleta, Adolfo Araiz, Mauricio Olite, Itziar Gómez y Angel Rincón se encerraron por la tarde en su despacho, tras entregar dos escritos en el registro de la Cámara, uno para informar al presidente del Parlamento, el socialist Javier Otano, sobre su intención de encerrarse y otro para solicitar la convocatoria urgente de la Comisión de Derechos Humanos.

Otano convocó una reunión de la Mesa y Junta de Portavoces de la Cámara y comunicó a los asistentes su decisión de desalojar a los cinco parlamentarios.

Según fuentes de la coalición independentista, únicamente los portavoces del PSOE y de Unión del Pueblo Navarro (UPN) apoyaron la medida, mientras que los representantes de Eusko Alkartasuna (EA) e Izquierda Unida (IU)se opusieron.

Javier Otano instó a los parlamentarios de HB a que salieran del edificio señalando que los métodos de presión "contravienen el necesario respeto a los cauces democráticos que garantizan la libre expresión y el debate de los asuntos sobre los que el Parlamento navarro tiene competencia".

Los encerrados, según explicaron posteriormente, se negaron a abandonar su despacho argumentando que su actitud era pacífica. Finalmente, hacia las 10 de la noche, un numeroso grupo de policías foraes penetraron en el local y acompañaron a los parlamentarios hasta la puerta de salida.

En la calle, medio centenar de personas que portaban una pancarta con el lema "Salto del Negro. SOS" recibió con aplausos a los cinco parlamentarios "abertzales".