Las citadas fuentes señalaron que "hay que ser optimistas, porque no han salido de Madrid y puede que en los próximos días haya novedades importantes. Hay posibilidades de que se comando esté no muy lejano a caer".

"La situación policial actual es de máxima tensión y los terroristas conocen este hecho, por lo que la primera semana se esconden totalmente, no hacen ningún movimiento", continuaron. "Además, la 'operación jaula' se mantiene rigurosamente durante una semana y ellos lo saben, por los comandos anteriores que operaron en Madrid".

Explicaron que desde el momento en que la Policía activa el dispositivo de la "operación jaula", los terroristas "son los primeros qe hacen un seguimiento de la propia Policía. Los medios que tiene ETA les permiten tener controlados los movimientos policiales permanentemente, saben qué comunicaciones se da la Policía a través de sus emisoras y, por lo tanto, tienen una información de lo que hace la Policía después de los atentados".

Respecto a las infraestructuras con las que podría contar ETA en Madrid, las fuentes policiales consultadas señalaron que cuando se descubrió el piso que la organización terrorista tenía en la calle Dotor Fleming, la documentación requisada desveló que la banda disponía de otros dos o tres pisos más en la capital, y será en uno de ellos donde los responsables policiales sospechan que se encuentran escondidos, "pero son difíciles de detectar y sólo con la colaboración ciudadana podremos hallarlos".

Además, indicaron que "ha quedado demostrado que el 'comando Madrid' es muy difícil de desarticular del todo y está claro que tienen pisos, garajes. Podemos deducir que, en estos momentos, tienen una buen infraestructura en Madrid".

En cuanto a la zona donde se produjo el atentado, una barriada donde existen bastantes viviendas militares, las fuentes consultadas explicaron que "es una zona fácil de actuación para ellos", porque "los militares tienen que bajar por las calles estrechas hasta las anchas, que es donde son recogidos para ir al trabajo".