En un hilo de Twitter, Álvarez partió de que, con la guerra, "se incrementarán los precios de los combustibles y de algunas materias primas fundamentales, al reducirse su oferta", y de que "una mayor inflación puede suponer una pérdida de poder adquisitivo de los salarios, y el deterioro de la competitividad externa de las empresas".

Ante esa perspectiva, el secretario de Estado insistió en la tesis de Podemos de que es "urgente reformar el mercado eléctrico, porque es totalmente irracional remunerar hidroeléctricas y nucleares al elevado precio que va a alcanzar el gas", añadiendo ahora que "es además absurdo mantener en manos de Putin un elemento de chantaje de estas características".

Pero, además, considera que "el Gobierno debe explorar el margen para subsidiar el consumo de las familias", porque, a su modo de ver, "evitar una espiral de inflación no puede hacerse a costa de que los salarios pierdan capacidad adquisitiva". Por eso "es necesario un pacto nacional de rentas que establezca incrementos salariales plurianuales" y mantener la creación de empleo.

Finalmente, Álvarez señaló expresamente de dónde sacar los recursos económicos de esta ayuda gubernamental. "Para ello, España debe contemplar en las próximas semanas la posibilidad de hacer uso del segundo tramo de 70.000 millones € de préstamos del Next Generation. Recordemos que el paquete de expansión fiscal italiano duplica al español", concluyó el dirigente de Podemos.