Durante los últimos 18 meses, periodo en que se empieza a notar un incremento superior al de otros años del número de presos, el aumento ha sido de 5.000 reclusos, lo que suone una subida del 12,8%.

Por comunidades autónomas, los mayores incrementos se registran en Aragón (32%), Castilla y León (27%), Asturias (16%) y Andalucía (15%). En el polo opuesto, la ciudad de Ceuta registra un descenso del 7,3% y Cantabria un 4 por ciento.

De los 44.013 internos dependientes de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias (está excluida Cataluña), la mitad, 22.984, están internados en tan sólo 16 centros penitenciarios.

En estas prisiones, la tasa de hacinamient media es del 154 por ciento, alcanzándose el 213% en la prisión de Las Palmas y el 192 en el complejo de Valencia.

"Nos encontramos ante el momento más crítico de las prisiones españolas en los últimos 25 años", afirmó ACAIP en un comunicado. En su opinión, todo el problema se debe a una absoluta falta de planificación del Gobierno "desde el momento en que esta tendencia alcista se debía haber previsto de foma adecuada por los responsables políticos".