La portavoz peneuvista en el Congreso en materia de justicia, Margarita Uría, recordó en rueda de prensa que la finalidad de la Ley de Solidaridad con las Víctimas del Terrorismo es recompensar a quienes dejaron su vida en la defensa de los valores que hoy rigen la vida e España.

"Mal encajan estos planteamientos con que se pueda conceder una condecoración a quien fue pública y notoriamente reconocido como torturador", dijo Uría. La viuda de Melitón Manzanas, insistió, tiene derecho a ser indemnizada, pero otra cosa es la condecoración.

La diputada del PNV recordó que, desde el comienzo de la redacción de la ley, su grupo se mostró partidario de separar estas dos cosas. "Alerté a los ponentes de que el texto no nos llevara a condecorar a torturadores, y expresamete cité a Melitón Manzanas. Se me dijo que era una extremista, que me ponía en lo peor y que ese supuesto jamás se iba a producir", indicó.

Uría subrayó que la fecha de 1968, en la que fue asesinado Manzanas, sólo rige en la ley para las indemnizaciones, pero no para las condecoraciones. Además, negó que su concesión sea "un acto debido" para el Gobierno, ya que el Consejo de Ministros tiene facultad para aceptar o rechazar la solicitud tramitada.

Con la acumulación de los recursos presentados, Uía expresó su confianza en que el Tribunal Supremo sea sensible "al descrédito que supondría para el Estado el reconocimiento a los méritos de una persona que nunca debió ser asesinada pero que tampoco mereció condecoración alguna".