En declaraciones a Servimedia, Estrella dijo que la actitud del PNV refleja "una pataleta" que es consecuencia el malestar de los nacionalistas ante "lo que tradicionalmente ha sido su filiación política y su definición ideológica, que es un partido de la democracia cristiana".

"No creo que eso suponga un giro en sus postulados. Simplemente intentan expresar que no se encuentran a gusto y no se consideran comprendidos por los que comparten lo que hasta ahora ha sido su ideología", añadió.

El portavoz socialista precisó que esta decisión se produce tras una serie de choques y enfrentamientos con quien ahor preside la democracia cristiana internacional, el popular Javier Rupérez. "Es un gesto de desprecio hacia el PP, es un gesto de llamada de atención", subrayó.

A su juicio, la decisión del PNV es también "una manera de presionar a otros partidos" ante el expediente de la Comisión Europea abierto al País Vasco por la cuestión de las vacaciones fiscales.