En contra del pronóstico inicial, el PNV parece tomar en serio ahora su inclusión en el Ejecutivo del Estado, aun en el supuesto de que Convergència i Unió (CiU) sól ratifique un pacto de legislatura con el PSOE.

Mientras delegaciones de "peneuvistas" y socialistas se preparan para estudiar las coincidencias programáticas, las especulaciones apuntan a que Xabier Arzalluz reclamará la cartera de Industria o, en su defecto, la de Obras Públicas.

La presencia casi segura del "vicelehendakari" vasco y consejero de Industria, Jon Azúa, en la delegación del PNV permite pensar en el interés del partido por el ministerio que dirige hasta ahora Claudio Aranzadi.

La unanimidad sobre la conveniencia política de sentarse en el Consejo de Ministros se extiende a las filas nacionalistas, e incluso los más reticentes, como el entorno de Ajuri Enea, parecen ver ahora con buenos ojos esta hipótesis.