Emilio Olabarría, portavoz de Interior de los peneuvistas en el Congreso, dijo a Servimedia que esta solicitud de información es la que plantea su partido siempre que se suicida un recluso, "sin que el hecho de ser de ETA incorpore ningún elemento adicional ni específico".

Olabarría explicó que su formación mantiene la tesis de que la Administración debe dar cuenta en estos casos de si se ha sido "suficientemente diligente" en la aplicación de una serie de controles que están establecidos, como el Protocolo Para la Prevención de Suicidios en las cárceles.

Por lo tanto, este portavoz indicó que habrá que ver si se ha hecho un seguimiento adecuado del etarra Igor Angulo y si había elementos que podrían haber llevado a evitar que este miembro de la organización criminal se quitase la vida.

En este sentido, Olabarría recalcó que existe por parte de las autoridades penitenciarias una "obligación genérica de custodia y de garantía de integridad física y de integridad moral" de los internos que se encuentran en las prisiones.

Por otra parte, el portavoz peneuvista rechazó hacer interpretaciones desde el punto de vista político sobre el hecho de que el etarra fallecido, que perteneció al "comando Nafarroa", se quitase la vida pese a que su situación penitenciaria no era la más complicadas entre los recursos de la banda.

Igor Angulo cumplía una condena de 34 años de prisión, acumulada en una pena de 20, por pertenencia a banda armada y otros delitos conexos, aunque no por la comisión de ningún atentado mortal o que provocara heridos.