Representantes de ambas formaciones políticas ofrecieron hoy una rueda de prensa en la que denunciaron los apagones del alumbrado público que se producen en la localidad cada vez que los sectores abertzales protestan por la muerte de algún activista de ETA o por la extradición de un preso y que se realizan con el consentimiento del alcalde abertzale.

La reacción de los ediles de EA y PNV se produce tras conocer la iniciativa prmovida por 300 vecinos de Etxarri-Aranaz para exigir a la alcaldía que condene el reciente atentado contra la estación de RENFE de la localidad, que supuso daños materiales valorados en 38 millones de pesetas.

Los portavoces de ambos partidos dieron su apoyo a la iniciativa vecinal, que pretende que el alcalde convoque un pleno extraordinario para condenar el atentado, solicitud a la que Manuel Campos se ha negado.

En su opinión, este tipo de acciones, así como las "algaradas callejeras" que se poducen en Etxarri, repercuten negativamente en el desarrollo económico de la zona. "Se está creando un ambiente malo para cualquier tipo de inversión", señalaron los ediles nacionalistas, quienes añadieron que "de culpar a alguien, hay que culpar a HB".