La carta está dirigida a la banda terrorista en respuesta a su último comunicado, en el que se responsabilizaban del atentado de Joseba Goikoetxea y le acusaban de ser un torturador. El PNV señala que, ante esas acusaciones, se siente en la obligación de dirigirsea los terroristas "para que nadie piense que el nacionalismo vasco es bomba, asesinato y secuestro y porque es necesario distanciarse absolutamente de vosotros (ETA)".

"Vuestra alternativa dejará en este pueblo una estela de sangre y destrucción, ya que se fundamenta en la imposición y la mentira", continúa el escrito, en el que los peneuvistas recuerdan a los etarras que "vuestros máximos ideólogos y dirigentes, como Antxón, Txelis, etcétera, declaran sin rebozo que vuestra guerra está perdida y que stáis también en trance de perder vuestra batalla política".

El PNV consideraba hasta ahora que era completamente inútil responder a los comunicados etarras y aseguran que si en esta ocasión lo han hecho, "no es sólo porque la banda terrorista manche la memoria del sargento mayor de la Ertzaintza, Joseba Goikoetxea, sino porque entiende que para cualquier grupo político es absolutamente necesario distanciarse del terrorismo".

DESTRUIR LOS VALORES VASCOS

La misiva señala que el terrorismo etarraestá "tirando por el suelo todo lo que en el mundo se ha tenido como valores propios del vasco: la verdad, la lealtad y el respeto por los demás". Asimismo, el PNV afirma que el horror tiene grados y que el que causa ETA ha roto ya todas las barreras.

El texto plantea a ETA que "acudís a las mentiras más burdas para justificar lo injustificable". "En un Estado en el que se ha abolido la pena de muerte, vosotros matáis, sin juicio, sin derecho a defenderse, sin acusación previa. Y matáis alevosamente. abéis llegado a la bomba ciega y matado a mujeres y niños", prosigue la carta.

La dura crítica a ETA afirma que "según vosotros, en Euskadi no puede haber policía vasca, ni Gobierno, ni Parlamento hasta que vosotros, tras la victoria final y con la 'liberación total' dotéis al pueblo vasco de instituciones totalitarias".

También el PNV acusa a ETA de recurrir a las mentiras para justificar el asesinato del sargento Goikoetxea, quien según dice el comunicado, "no tenía alma de torturador como vosoros, que no dudáis en tener a una persona aislada durante meses, entregada a su soledad fuera del tiempo, algo que no sucede a vuestros presos en ninguna cárcel".

La dirección nacionalista acusa también a ETA de proyectar su sociedad sin contar con los demás. "El pluralismo es un concepto ajeno a vosotros", dice la carta, y añade que el nacionalismo vasco está dolido porque ETA ha abortado "cualquier esperanza de que podamos interesarnos por vuestras propuestas, y nos duele también que estéis condenano a tantos presos al cumplimiento íntegro de sus condenas".

La carta termina rechazando la acusación de que la Ertzaintza dependa del PNV, lo que los nacionalistas vascos consideran una prueba más de la incapacidad de ETA para comprender el mundo que le rodea.