EL PNV SE DECLARA PARTIDO DE OPOSICION Y AMENAZA CON "DESESTABILIZAR"
- Exige que las autonomías sean circunscripción eectoral en los comicios al Parlamento Europeo
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El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Iñaki Anasagasti, anunció esta noche un cambio de rumbo en la estrategia de su partido, al afirmar que el PNV será a partir de ahora un partido de oposición y que votará contra el proyecto de ley de Presupuestos generales del Estado para 1994, salvo que ocurra un "milagro". Además, amenazó con utilizar sus cinco diputados en el Congreso para desestabilizar en Madrid el paco PSOE-CiU y en Euskadi su Gobierno de coalición con el PSOE.
Anasagasti utilizó la rueda de prensa posterior a la reunión entre delegaciones del PSOE y el PNV sobre el `impulso democrático para redoblar los ataques y dejar patente el distanciamiento entre ambas formaciones.
"Hemos negociado mal", comenzó reconociendo el portavoz peneuvista, pero añadió a renglón seguido que los socialistas también se han equivocado al iniciar la carrera electoral vasca un año antes de los comicios y responsabilió de ello al secretario general del PSE-PSOE, Ramón Jáuregui. Afirmó también que otro error ha sido no admitir enmiendas suyas a los Presupuestos Generales.
Recordó que el PNV estaba dispuesto hasta entrar en el Gobierno y que los dirigentes del partido lo defendieron ante la Asamblea del partido, "pero aquello era un acto de fé", ironizó en referencia a lo que ha sucedido después con la condición que pusieron: la finalización de las 54 transferencias pendientes al País Vasco; algo que han suscrito PSE y PP, matizó.
Preguntado si no cree que el PSOE rechaza colaborar ahora con el PNV porque ya no le necesita (con CiU tiene mayoría absoluta), Iñaki Anasagasti dijo que esto se puede reconducir y que la clave la tienen los socialistas, pero acto seguido amenazó: "Si nosotros hubieramos querido estar en la parrilla de salida en plan brioso corcel ganador, hubieramos entrado en el Gobierno".
"Si nostros hubiéramos planteado una negoaciación absolutamente `light`", prosiguió, "estaríamos ahora en ua foto absolutamente maravillosa, pero, claro, nosotros decimos al PSOE que debería tener `peneuveólogos`, en el sentido de saber quiénes somos. No somos gente fácil a la hora de llegar a acuerdos sencillos (...) Esos cinco votos no son necesarios para formar gobierno, pero tienen una gran capacidad desestabilizadora; no solamente aquí sino también en los posibles pactos en Euskadi. Y el PSOE tiene que tenerlo muy presente (...) O somos aliados o somos oposición, pero no tenemos vocación de mediopensionists".
CIU APRUEBA COSAS "POCO COMPRENSIBLES"
Aprovechó también para criticar al socio del PSOE, Convergencia i Unió, asegurando que algunas de las votaciones son "poco comprensibles" desde un punto de vista nacionalista. "No es un problema de celos, ni de sentirse marginados. Porque, ya digo, si nosotros hubiéramos accedido, al planteamiento inicial, estaríamos ahora en el llamado coche oficial con la ikurriña puesta, pero esa no es nuestra vocación".
Indirectamente, el portavoz del PNV en el Conreso culpó a los "malos técincos" que han negociado por parte socialista las transferencias pendientes, en referencia al ministro para las Administraciones Públicas, Jerónimo Saavedra; y a Jáuregui, a quien el PNV querría haber visto "de vicelehendakari, porque ahora estaría entretenido con la gobernabilidad de Euskadi y no tensando la cuerda, como nos la está tensando".
Minutos después, Anasagasti matizó estas palabras asegurando que no está en el ánimo de los peneuvistas desestabilizar aliándose conHerri Batasuna, por ejemplo; pero tampoco lo descartó. "Mientra HB no condene la violencia de ETA, no tenemos nada que hacer. Ahora, todo en la vida es posible, pero, hoy por hoy, la respuesta es no (...) En Euskadi se está abriendo un panorama político muy plural, donde todo es posible".
"Nosotros no tenemos vocación de desestabilizar. Somos gente responsable, seria. Lo que ocurre es que la vida política no se puede plantear llegando a acuerdos con un partido (CiU) y al otro (PNV), de convidado de pidra, aplaudiendo la operación. Tenemos una capacidad política de denuncia y de poner en situación difícil a quienes han hecho ese acuerdo".
El PNV no entiende cómo el PSOE, teniendo mayoría absoluta la pasada legislatura, formó el llamado "bloque constitucional" con su partido, con CiU y con el CDS, y ahora que no tiene mayoría, se decanta sólo por los nacionalistas catalanes.
Por su parte, el ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, que compareció ante la prensa después que Anasagast, negó que los representantes peneuvistas se hubieran expresado en estos mismos términos durante la reunión e intentó centrar su exposición en lo tratado.
"Es verdad que hemos hablado un poco de la discusión presupuestaria, pero desde luego, puedo asegurar que no hemos recibido amenazas en los términos en que me plantean (los periodistas, después de oír a Anasagasti)", dijo el ministro.
EL TC O LA "GUILLOTINA AUTONOMICA"
Al igual que el portavoz del PNV en el Congreso, Pérez Rubalcaba afirmó qu ambas partes valoran como "muy cordial" y positivo el encuentro mantenido hoy respecto al impulso democrático -Anasagasti lo llegó a calificar "de guante blanco", por el acuerdo al 90 por cientos sobre los temas a tratar, en comparación con la tensión en otros campos-.
PSOE y PNV mantendrán la semana próxima un nuevo encuentro para perfilar los tres temas en que los peneuvistas plantean problemas: la reforma del Senado, que quieren que reconozca el `hecho diferencial`, a lo cual el Gobierno no está dpuesto; el reconocimiento de la autonomía como circunscripción de elecciones europeas -enviarán un documento al Ejecutivo-, para lo cual el PSOE exige consenso de todas las fuerzas políticas; y presencia autonómica en el Tribunal Constitucional.
Respecto a este último punto, el PNV cree que el Alto Tribunal ha funcionado más como una "guillotina autonómica" que como una instancia jurisdiccional.
(SERVIMEDIA)
11 Nov 1993
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