Así, la PMP, insistió en la promoción de los derechos de las mujeres a lo largo de todas las etapas de la vida, desde una perspectiva intergeneracional. En palabras de Jesús Norberto Fernández, presidente de la Plataforma, “volvemos a recordar que las experiencias y aprendizajes que las mujeres mayores han acumulado a lo largo de la vida no suelen ser reconocidas y eso limita la posibilidad de que futuras generaciones aprendan de ellas, aceptando sus contribuciones sociales y reconociendo sus logros en la conquista de derechos y en el avance de la igualdad en nuestra sociedad”.

Igualmente, la PMP instó a promover esa visibilidad en toda su diversidad, a combatir el edadismo y a impulsar proyectos que pongan especial atención en las experiencias y formas de relación y participación de las mujeres mayores en el ámbito público.

Asimismo, la PMP urgió a restaurar la deuda social histórica que la sociedad tiene con todas ellas, mediante la mejora de las pensiones más bajas, como son las no contributivas y de viudedad (un 41% de las mujeres recibe únicamente este tipo de prestación). Del mismo modo, reclamó la erradicación de la brecha de género en las pensiones, que en España se sitúa actualmente entorno al 34%, así como ha recordado que la tasa de cobertura de la pensión de jubilación es un 27% menor para las mujeres. Por ello, la Plataforma demandó el necesario refuerzo de los servicios públicos de apoyo y cuidados para que las mujeres de todas las edades puedan mantener su autonomía y activismo.

Finalmente, Fernández, manifestó que “es tiempo de eliminar los estereotipos, imaginarios y representaciones negativas sobre las mujeres mayores de 65 años”. Además, agregó que se debe “reconocer su contribución a la sociedad, valía y autonomía y abandonar el concepto de la vejez vista como un obstáculo, para entenderla como una etapa de la vida en la que se continúan desarrollando proyectos y aportando a la comunidad”. “Es momento de valorar y respetar a las mujeres mayores, quienes merecen ser reconocidas también por su enorme capacidad de crear relaciones sociales, por su participación en la vida social y cultural y por su tendencia a tejer redes intergeneracionales”, concluyó.