El intercambiado, cuyo proyecto se encuentra en la actualidad en fase de redacción, estará situado en la parte central del paseo de la Castellana y al norte de la misma.

Por este motivo fue convocado un concurso de ideas, en el que el jurado estaba formado por representantes del Ayuntamiento, Consorcio de Transportes y colegios profesionales de arquitectos e ingenieros de caminos.

La idea ganadora, cuyos autores son los arquitectos Juan Carlos Martín Baranda y Tomás Domínguez del Castillo, plantea un conjunto deunidades constituida por una amplia batería de andenes para autobuses interconectados directamente entre sí y con el metro, mediante unos accesos independientes, con salida a cada uno de los andenes.

El conjunto estará protegido de las inclemencias meteorológicas por unos elementos estructurales y marquesinas del tipo sombrilla, que, además de su misión de protección, mitigan estéticamente la aridez del entorno.

El proyecto se completa con un edificio que alberga los servicios de atención al viajro, aseos, información, taquillas, oficinas y cafetería. Asimismo, incluye paradas de taxi al norte y al sur del intercambiador.