En rueda de prensa, representantes de distintas organizaciones que componen la plataforma también reclamaron a las formaciones políticas la derogación de los acuerdos Iglesia-Estado, la exclusión de símbolos religiosos en las escuelas, y que con dinero público no se financie el adoctrinamiento religioso.

Francisco Delgado, vicepresidente de Europa Laica, aseguró que los citados acuerdos "son incompatibles con el espíritu constitucional" y "que no se puede tener a los niños secuestrados en clase de religión católica".

Por su parte, Augusto Serrano, portavoz de la Confederación de Sindicatos de Trabajadores de la Enseñanza, acusó a los obispos de "mentir" cuando dicen que el Gobierno no cumple el acuerdo Iglesia-Estado sobre Educación y les tachó de "locos" por afirmar que el laicismo del Gobierno socialista "amenaza la democracia".

Fernando Martín, representante de la Confederación Española de Asociaciiones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA), destacó la necesidad de profundizar y explicar lo que es un Estado laico "para combatir la confusión" sobre esta cuestión, "que introduce la jerarquía católica".

Juanjo López, secretario general del Sindicato de Estudiantes, denunció, por su parte, la existencia de libros de Educación para la Ciudadanía que expresan su rechazo al aborto y al divorcio y que tienen una visión "sexista" de los roles del hombre y de la mujer.

Además, López exigió a los partidos de izquierdas "que acaben con la situación de privilegio de la Iglesia católica y una herencia, que ningún gobierno se ha atrevido a tocar".

Finalmente, Loles Dolz, responsable de Educación de IU, subrayó que su formación política asume todas estas reivindicaciones y concluyó que "IU está claramente comprometida con la escuela laica y con una sociedad laica".