El covenio, que pretende superar la situación de crisis que vive la empresa automovilística, prevé un aumento salarial del 2,9 por ciento para este año, del IPC real para 1995 y del IPC más un punto para 1996.

Según los resultados del referéndum, hechos públicos esta madrugada, el sí, apoyado por los sindicatos mayoritarios CCOO y UGT, consiguió 5.760 votos (el 52 por ciento del total), mientras que el no, apoyado por la CGT, logró 5.090 votos (el 46 por ciento). En la votación participaron casi tres cuarts partes de los trabajadores de Seat.

Se da la circunstancia de que en la planta de Seat de Martorell, en las que están empleados más de la mitad de los trabajadores de la empresa, el no se impuso al sí, aunque por un margen mínimo de 3,7 puntos.

Sin embargo, en la Zona Franca de Barcelona, que cuenta con 4.461 trabajadores, los votos afirmativos superaron a los negativos por un amplio margen (el 57 por ciento contra el 40 por ciento).

La celebración de este referéndum fue exigida por CCOO, ue pidió que la plantilla de Seat expresase su opinión sobre el preacuerdo antes de que el comité de empresa y la dirección de Seat firmaran el convenio.

Por su parte, UGT, sindicato mayoritario en Seat, no creía necesaria la consulta a los trabajadores. Los dos sindicatos mayoritarios pidieron el sí en el referéndum, mientras que la CGT defendió el no, al considerar que el convenio permite a la empresa reducir sus costes laborales en un 10 por ciento.

Además del aumento de los salarios para el tienio 1994-96, el convenio prevé facilitar un sistema de prejubilaciones que los sindicatos llevaban pidiendo desde hace un año y medio.

También introduce el trabajo en días festivos, de manera que los empleados deberán trabajar al menos diez festivos al año, y modifica las vacaciones de verano, permitiendo a la empresa que fije las fechas de una de las cuatro semanas de vacaciones.