Mogín presidió la reunión de representantes del ministerio y las 17 comunidades autónomas, que comenzó ayer y fue clausurada este mediodía en Logroño.

Los participantes debatieron los créditos presupuestarios para los distintos programas del año que viene, para el Sistema Público de Servicios Sociales, para el Plan Estatal del Voluntariado -que se iniciará en 1998-, para el programa de Desarrolo Gitano y para Exclusión Social, señaló Mogín.

Ministerio y autonomías trataron sobre los criterios de las políticas actuales y "cuáles son los cambios que vamos a introducir para el año que viene, dentro de esta reflexión de mejorar las posibilidades de inserción de las personas que están en situación de exclusión, y al mismo tiempo conseguir que eso se haga de la forma que garantice los derechos de cada uno de los ciudadanos", afirmó.

Una de las cuestiones planteadas que se seguirá discutiendoen comisiones técnicas son las rentas mínimas de inserción de las diferentes autonomías y "la posibilidad de ver qué tipo de criterios mínimos podían ser comunes en todas las administraciones públicas".

También se debatió "sobre la posible regulación de las empresas de inserción (ya hay comunidades autónomas que están elaborando estrategias al respecto) y sobre los Proyectos Integrales que se están desarrollando en las distintas comunidades autónomas, en algunos casos en colaboración nuestra, en otroscon fondos europeos y también a través de las subvenciones del IRPF", indicó la directora general.

El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales ha aumentado un 7,5% su presupuesto para estas cuestiones (12.000 millones de pesetas), pero si se tienen en cuenta las aportaciones autonómicas y locales al Plan Concertado la cifra se eleva a 60.000 millones, declaró Mogín.