En declaraciones a Servimedia, la responsable socialista explicó que concentrar el trasvase de 1.050 métros cúbicos de agua durante el invierno no evita el daño ecológico, porque se reducen las reservas de la zona y aumentan los daños cuando llega el verano.

Los socialistas, que han analizado las enmiendas junto al catedrático Narcís Prat, consideranque tras la insistencia popular en los trasvases se esconde "una fuente de negocio para empresas constructoras y eléctricas", dijo.

Narbona critica que a la hora de elaborar este proyecto el Gobierno no haya tenido en cuenta las alternativas existentes a los trasvases, muchas de ellas recogidas en el Plan alternativo presentado por el PSOE, con 200 enmiendas parciales.