El ministro portavoz desmintió hoy una información aparecida en la revista "Triangle" en la que se le acusa de no haber declarado a Hacienda el importe de la venta de las 600 acciones que tenía en Ercros mientras presidió la empresa.

"Es una perfecta memez", dijo tras asegurar que el Gobierno se queda "muy tranquilo" mientras los esfuerzos de la oposicón se concentren en intentarle "desprestigiar con estas mamarrachadas".

Piué compró las citadas acciones de Ercros al hacerse cargo de la presidencia de la empresa para demostrar su compromiso personal con el proyecto empresarial. Para la adquisición solicitó un crédito y tras la venta la operación resultó "ligeramente negativa" para sus intereses, según explicó la pasada semana en el curso de un encuentro con periodistas.

Sobre la petición hecha por el PSOE de que se someta a una inspección fiscal para limpiar de toda duda su actuación, Piqué dijo tras la firma de un acuero con el sector gasista en el Ministerio de Industria, que "todos los ciudadadanos somos iguales ante la ley y por tanto todos podemos estar sometidos a una inspección fiscal".

Reconoció que los políticos "tenemos una obligación adicional de transparencia" y denostó el uso que trata de hacer el PSOE de la inspección fiscal para "aplicarla contra las personas que no piensan como ellos". A su juicio, esta actitud "no deja de ser un reflejo curioso en la mentalidad del señor Borrell, que a lo mejor estab acostumbrado a hacerlo con anterioridad".

Pese a estas críticas contra los socialistas, insistió en que no tiene nada que ocultar, aseguró que dará toda la información necesaria para aclarar su actuación y anuncio que lo hará "en el momento y a través de los medios que considere oportunos". En cualquier caso, "si tengo que pasar por una inspección fiscal lo haré lo mismo que cualquier otros ciudadano, no tengo ningún temor".

En principio, Piqué no contempla la posibilidad de comparecer ante el Cngreso para explicar su gestión en Ercros porque "una cosa es utilizar la sede parlamentaria para explicar la acción de Gobierno y otra llevar al Parlamento las explicaciones sobre mi actividad privada".

A su juicio, esa opción "no es la más correcta" y por eso está "estudiando" un mecanismo distinto como el "comunicado o la carta abierta" en algún medio de comunicación.

Piqué espera que la oposición se dé por satisfecha con esas explicaciones aunque advierte que hasta el momento el PSOE no está nteresado por "esclarecer la verdad sino por continuar con una táctica de desgaste que va a tener que terminar porque no tiene ninguna base".

Según dijo "el Gobierno lo tiene muy bien con una oposición de estas características" sólo preocupada por atacar al portavoz del Gobierno y ausente de asuntos que preocupan a los ciudadanos.

Por ello, el portavoz del Ejecutivo pidió al primer partido de la oposición que rectifique su postura y acuda a la subcomisión creada en el Congresopara analizar la plítica de subvenciones del Ministerio de Industria en la que el PP garantiza "total transparencia" y las comparecencias que sean precisas.

"Espero que recapaciten y hagan una oposición basada en la presentación de alternativas y argumentos y no sólo en la búsqueda estricta del desgaste de las personas", dijo.

Josep Piqué espera que el enfrentamiento entre el Gobierno y el PSOE por su causa no enturbie las relaciones del presidente, José María Aznar, con el candidato socialista, José Borrell, recintemente desbloquedas en la reunión entre ambos líderes el pasado 10 de febrero.

"Hay temas tan importantes que me parece que empecinarse y obsesionarse por cosas de este tipo lo que hace es desprestigiar a la oposición ante los ciudadanos", aunque reconoció que "la trayectoria reciente del PSOE no avala que eso vaya a suceder".