Piqué recogía así el guante lanzado previamente por el presidente de la patronal de fabricantes Anac, Jesús Ruiz Beato, quien había reclamado la supresión del impuesto de matriculación.

En el marco de la celebración de los 25 años de Anfac, el ministro de Ciencia y Tecnología reconoció que el sector "lleva razón" en ese punto, ya que la fiscalidad en la adquisición de un coche es mayor en España que en el resto de Europa.

Sin embargo, les recordó que en lo referente a los impuestos sobre el uso del automóvil, España tiene una situación "mejor", por lo que sería bueno "homologar" tanto el gravmen sobre la adquisición como sobre el uso con la situación europea.

El presidente de Anfac también reivindicó medidas para fomentar la renovación del parque automovilístico, una vez que el Plan Renove caduca el 31 de diciembre próximo, con el fin de contar con automóviles menos contaminantes y más seguros.

En respuesta, Piqué apuntó que es "deseable" dicha renovación, en un país en el que la mitad del parque automovilístico tiene más de siete años y el 35% más de diez.

El ministro mostró ladisposición de su departamento a esta cuestión, pero "a ver si es posible la del conjunto del Gobierno", apuntó Piqué, reconociendo las diferencias existentes en el seno del Gobierno para poner en marcha un programa de renovación del parque automovilístico, ya que es un tema "muy difícil y muy complejo".

MAS FLEXIBILIDAD

El tercer punto de reclamación de Ruiz Beato fue el de la necesidad de mayor flexibilidad en el sector, que le permita mejorar su competitividad, y abogó por que las condiciones de rabajo se pacten en cada empresa, y no a nivel sectorial.

A su juicio, sería "deseable" una reforma del Estatuto de los Trabajadores que diera libertad para negociar todas las materias en el convenio de empresa. Habrá "más temporalidad, más flexibilidad, pero también más respeto a la vida personal" del trabajador, señaló.

Piqué dijo que es "absolutamente imprescindible" que el sector tenga la "mayor flexibilidad", pero eso debe enfocarse en este momento desde el punto de vista de la negociación drecta entre empresarios y sindicatos, ya que "a estas alturas de la legislatura" no es "lo más consecuente y lo más razonable" el mofificar las leyes que regulan la negociación colectiva.

El ministro puso como ejemplo los acuerdos que empresarios y sindicatos textiles le han planteado al Gobierno para hacer frente a la delicada situación que atraviesa el sector, a los que el Ejecutivo es receptivo.

Invitó a Anfac y sindicatos de automoción a seguir esta senda y negociar la forma de hacer frente afenómenos como la deslocalización de inversiones o la ampliación de la UE, mediante la creación de instrumentos como un observatorio sectorial.

Eso sí, el ministro les indicó que la mejor receta para competir es la inversión en innovación, en desarrollo y en diseño. Anunció que el nuevo Plan Nacional de I+D+i 2004-2007 contará con "planes específicos" para el sector del automóvil y el de la fabricación de componentes.

Piqué no ve motivos de inquietud en los próximos cinco ó siete años, ya que hayplanes e inversiones que garantizan la situación del sector, por lo que se debe trabajar en la forma de retener esas inversiones y darles continuidad.

El ministro resaltó, por último, que las aspiraciones del sector son "legítimas, lógicas y dignas de ser escuchadas", puesto que constituye un "referente imprescindible" del tejido productivo e industrial español.