Castellano recordó en los pasillos del Congreso que el Ejecutivo tiene ya la oportunidad de cumplir "lo que tan frecuentemente ha expuesto de respetar la voluntad de los tribunales y las resoluciones judiciales y, pura y sencillamente, tramitarla como cualquier otra extradición".

Explicó, además, que la tramitación de esta petición, una vez formalizada por parte del juez, respetaría totalmente la indeendencia del poder judicial.

Finalmente, confió en que este trámite sea "compatible" con las conversaciones mantenidas por José María Aznar y el primer ministro británico, Tony Blair. "No caigamos en la contradición de estar tramitando la extradición y haber tenido una conversación para que el receptor de la extradición, cuando llegue, la desprecie", concluyó.