Pimentel explicó que este sistema seguirá siendo deficitario hasta 1998 (año en el que la aportación del Estado ya será muy pequeña), pero en 1999 encontrará su equilibrio financiero.

De acuerdo con estas perspectivas, dijo que sería deseable abrir un debate para mejorar y modernizar el sistma, de forma que se busquen "fórmulas imaginativas" para que estos fondos incentiven la inserción laboral de los desempleados. Dijo que la reforma estará abierta a las peticiones de los agentes sociales.

En este sentido, recordó que los sindicatos pretenden ampliar la cobertura de las prestaciones por desempleo a los sectores menos favorecidos y crear un fondo de reservas con los excedentes del fondo, mientras que los empresarios son partidarios de rebajar las cotizaciones a la Seguridad Social. Asimimo, apuntó que el sobrante del sistema se podría destinar a política activas de empleo.

En relación con la mayor incentivación de la contratación indefinida a tiempo parcial, el secretario de Empleo recordó que ahora estos contratos no reciben bonificaciones, por lo que es necesario abordar este asunto.

Asimismo, Pimentel afirmó ante la Cámara Alta que el plan de lucha contra el fraude a la Seguridad Social está obteniendo mejores resultados que los previstos. Aseguró que este año se superarán la expectativas de ahorro de 60.000 millones de pesetas por este concepto.