El informe fue presentado ayer por la diputada Dominique Gillot (PS) bajo el título "El derecho de los sordos". Su intención es ofrecer respuestas a las necesidades específicas de las personas afectadas por la sordera, que representan un total de 4 millones e el país vecino.

Gillot propone, en primer lugar, el reconocimiento académico del lenguaje de signos utilizado por los sordos "hasta un nivel universitario". Por otra parte, pretende la erradicación del analfabetismo, ya que, recordó, en Francia un 80% de los sordos profundos son analfabetos y sólo un 5% pueden acceder a la enseñanza superior.

"El francés y el lenguaje de signos han de ser los dos elementos de una enseñanza equilibrada a todos los niveles", dice el informe de esta representante d la provincia de Val-dOise, que espera una "favorable acogida" de su propuesta por parte del Ministerio de Trabajo francés.

En segundo lugar, Gillot quiere lograr el reembolso total de prótesis auditivas para sordos hasta la edad de 20 años. También, agregó, se debe reducir el precio de estos aparatos para las personas mayores y miembros de familias más modestas.