Dicho programa, ampliado en 1971 para beneficiar a personas con discapacidades graves, dificulta la promoción de estos trabajadores, ya que si son promovidos a puestos directivos, ya no se considerarán parte del porcentaje de plantilla necesario para poder participar en el mismo.

Gracias a "AbiltyOne", 42.000 personas con discapacidad tienen trabajo en organizaciones sin ánimo de lucro dedicadas a suministrar productos y servicios a instituciones públicas.

Para poder participar en el programa, estas organizaciones deben tener al menos un 75% de sus empleados ciegos o con discapacidad grave.

Sin embargo, si quienes tienen discapacidad son directivos no se cuentan la hora de cumplir dicho porcentaje, lo que dificulta su promoción a dichos cargos.

Por ello, Raleigh Lions Clinic for The Blind, reclama que se enmiende la ley para que cuando un trabajador ciego o con discapacidad sea promovido a un puesto directivo, cuente como dos en lo que al cumplimiento de la cuota se refiere.

"La modernización del programa 'AbilityOne' fomentaría la promoción profesional de las personas ciegas a puestos de responsabilidad", asegura Kevin Lynch, presidente de National Industries for the Blind, una de las organizaciones que se beneficia del mismo.