El colectivo, denominado LSF-BAC y creado en marzodel año pasado, ha puesto de relieve que cada año nacen en Francia 200 niños sordos, de los cuales el 95 por ciento tienen padres sin problemas de audición.

Esta situación, según la presidenta de la citada asociación, Verón-Brunel, hace que el aprendizaje de la lengua de signos sea difícil fuera del sistema educativo.

La asociación consiguió recoger el pasado verano un total de 10.000 firmas para pedir al Gobierno francés que los estudiantes puedan aprender el lenguaje de los signos en la escuela

En Francia, el reconocimiento oficial del lenguaje gestual vino de la mano de la "ley Fabius" en 1991. Actualmente, los niños sordos tienen el derecho de aprender en la escuela el lenguaje de signos, aunque a menudo el bilingüismo se ve afectado por la falta de medios.