PIDEN LA ABSOLUCION PARA CARO Y VENERO, IMPLICADOS EN LA LLAMADA "MAFIA POLICIAL"

MADRID
SERVIMEDIA

La defensa de dos de los implicados en la denominada "mafia policial", el inspector de policía Antonio Caro y el joyero santanderino Federico Venero, solicitó hoy ante el Tribunal Supremo la absolución de sus patrocinados.

Antonio Cro y Federico Venero habían recurrido ante el Supremo la sentencia que la Audiencia Provincial de Santander dictó en 1988, en la que condenaba al primero a 6 años de inhabilitación por un delito de prevaricación y al segundo a 2 años de cárcel acusado de tenencia ilícita de armas.

La Audiencia cántabra, en el juicio que hoy se recurría, absolvió a Caro del delito de tenencia ilícita de armas, así como de todo cargo al comisario Francisco Javier Fernández Alvarez y a los inspectores de policía Victoriao Gutiérrez Lobo, Abelardo Rafael Martínez y Miguel Angel Berciano; los cuatro habían sido condenados en un juicio anterior por la desaparición del Santiago Corella, el "Nani", en 1983.

Jose Emilio Rodríguez Menéndez, abogado de Caro, mantuvo ante el Supremo que su defendido no incurrió en prevaricación, ya que no dejó de cumplir sus funciones maliciosamente y no tuvo, en ningún momento, ánimo de lucro.

DILIGENCIAS PARA ANULAR

Añadió que algunas declaraciones de Venero y de otros testigos se haían hecho sin que el juez instructor avisara de la fecha y el lugar, por lo que consideró que esas diligencias debían ser anuladas.

Para Rodríguez Menéndez no existe ninguna prueba de cargo que permita acusar a su defendido de prevaricación.

Por su parte, el defensor de Venero, Antonio Sarabia, pidió en primera instancia la absolución de su patrocinado. De no ser absuelto, señaló que debía ser condenado a una pena inferior a un año de cárcel, para evitar la prisión.

Según Sarabia, Vnero actu bajo la convicción de que su labor era conocida por la policía, por lo que su conducta no puede ser condenable. Además, recordó que Venero había acudido voluntariamente a la autoridad judicial.

EL FISCAL IMPUGNO LOS RECURSOS

En el transcurso de la vista ante el Tribunal Supremo, el fiscal impugnó los dos recursos y solicitó la confirmación de la sentencia de la Audiencia Provincial de Santander.

La sentencia dictada en 1988 declaró probado que el joyero Venero, confidente del inspector Caro, etregó con su conocimiento armas a delincuentes, alguno de los cuales era amigo del desaparecido el "Nani".

En 1983, Venero entregó a Laureano López un revólver comprado al herrero Salvador Fernández Veigas, quien resultó condenado por ello a un año de prisión en este juicio.

El arma fue finalmente recuperada en un registro a la casa del citado delincuente, tras un atraco a una joyería de Santander en el que Laureano López estaba implicado.

La sentencia añade que en noviembre del mismo año Veero proporcionó una pistola al delincuente Francisco Javier Sánchez y que entregó, en el verano de 1984, dos revólveres y una pistola a Angel Manzano, amigo de el "Nani".

(SERVIMEDIA)
18 Feb 1991