Según las conclusiones provisionales del fiscal, el vigilante golpeó a la víctima varias veces en la cara y cuando cayó al suelo le agredió con patadas en la cabeza y tórax, causándole lesiones que motivarían la muert del joven, de 19 años, doce horas más tarde.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 26 de diciembre de 1992, hace ahora dos años. Además de una pena de doce años, el fiscal pide al acusado una indemnización de 20 millones de pesetas para los padres de la víctima.

El acusado prestó hoy declaración y afirmó que tuvo que intervenir para tratar de imponer el orden cuando el joven fallecido y sus amigos comenzaron a lanzar vasos al aire y contra las paredes del local.

Alfonso Argibay Nogueiratambién aseguró que como consecuencia hubo una pelea en la que participaron un número indeterminado de personas. Sin embargo, negó haber golpeado a Juan Sambade cuando éste se encontraba ya en el suelo.

El fallecido fue trasladado a un centro médico de Cee y, posteriormente, a un hospital coruñés donde le fueron apreciadas lesiones de gravedad, entre ellas una hemorragia cerebral y un traumatismo craneoencefálico.

Mañana prestarán declaración los testigos de la acusación particular y los citados or el abogado defensor, que prevé solicitar la absolución de su cliente alegando legítima defensa.