Según el comunicado de Phone House, la batería virtual permite acumular la energía generada y no consumida para abaratar la factura o pasar ese consumo a otra casa, tanto si es propia como si no.

Toda la energía generada en la instalación se consume directamente si en ese momento se está haciendo uso en la vivienda. Si no, se vierte a la red y pasa a formar parte de la cuenta o batería virtual de la vivienda. Según sus cálculos, la propuesta permite un ahorro del 40% en la factura de la luz equivalente a unos 900 euros anuales.

La instalación de siete placas solares tiene un coste de 5.736 euros, para los que se puede conseguir distintas ayudas (subvenciones del Gobierno y bonificaciones en el IBI de algunos ayuntamientos) y rebajarlo a 3.825 euros. Ambas cantidades, financiadas a diez años, suponen un importe mensual de 61 y 40 euros, respectivamente.