Según explicó el fabricante en un comunicado, las críticas del presidente de la Asociación a la decisión de Philip Morris de mantener el precio del Marlboro y devolver a su precio original el L&M y el Chesterfield "no sirven a los intereses de su sector, pues no son compartidas por muchísimos estanueros".

Asimismo, la multinacional norteamericana critica al dirigente patronal por sus comentarios en defensa de los consumidores, al recordar que "jamás se ha conocido que un consumidor proteste por una bajada de precios".

Philip Morris justifica los vaivenes de precios de su tabaco rubio en los últimos días, en que niguna de las marcas de la competencia había movido sus precios, tras la decisión del Gobierno de subir los impuestos, por lo que la empresa había incurrido en una situación de indeensión frente a la competencia.

Respecto a la congelación del precio del Marlboro se debe a su intención de no repercurtir toda la fiscalidad sobre el consumidor y al mismo tiempo aprovechar su atractivo comercial para evitar el comercio ilegal con cajetillas de contrabando.