Los socialistas argumentan en su iniciativa que la gestión de Urdaci quebranta "sistemáticamente" los derechos constitucionales a comunicar y recibir libremente información veraz, y los principios de objetividad, veracidad e imparcialidad de las informaciones, la separación entre información y opinión, y el respeto al pluralismo político, religioso, social, culturallingüístico.

Añade que esta situación se ha hecho "especialmente insostenible en los últimos meses", para lo que pone como ejemplo la "ocultación" de la realidad en el seguimiento de la huelga general, las movilizaciones contra la reforma educativa, la catástrofe del "Prestige" o las manifestaciones para protestar contra la guerra en Iraq.