Horas después del incidente que han protagonizado españoles y franceses a 700 kilómetros de las costa gallegas, Olaizola dijo que el ambiente en lamar "está muy caldeado y no sabemos lo que pasará de ahora en adelante".

La pasada madrugada barcos españoles rompieron las redes de los pescadores franceses que utilizan artes de pesca prohibidas por las reglamentaciones comuntarias como señal de protesta.

Según el presidente de la cofradía guipuzcoana, se ha tenido que utilizar esta vía debido "a la ineptitud de las Administraciones". "Francia tiene que cumplir el reglamento comunitario y no está por la labor. Se ha denunciado varias veces el uo de artes ilegales y hemos utilizado todas las vías diplomáticas, pero aún no se ha hecho nada".

Olaizola destacó que la actual situación "se está poniendo muy dura" ya que en en la zona donde se ha producido el conflicto "hay un barco de la armada francesa con las armas en la mano dispuestos a intervenir" y que ha habido un abordaje de un barco español por parte de un pesquero galo.

La Comisión de pesca francesa aconseja a los pescadores españoles serenidad y les asegura que se tomarán las medias pertinentes pero éstos solicitan que las medidas sean tomadas en este momento. "No queremos medidas dentro de cuatro años", manifestó Olaizola, "nosotros comemos todos los días y si no hay pesca no ganamos y, sobre todo, no pescamos por la utilización de los franceses de un sistema de pesca prohibido".