El estudio se realizó entre 2.033 hombres que habían sufrido un ataque de corazón. Los que consumieron dos porciones de pescado graso a la semana durante dos años redujeron en un tercio el riesgo de muerte, señala un informe publicado este fin de semana en la revista "British Medical Journal".

Los autors del trabajo (los británicos Roger Harrison, de Wigan, y Michael Burr, de Cardiff) ensalzan las propiedades de este pescado: además de ser más barato que los medicamentos, carece de efectos secundarios. Además, es beneficioso para la dieta.

"Los beneficios para los supervivientes de un infarto de miocardio del consumo de pescado rico en grasa superan a los de algunos regímenes farmacológicos", aseguran los autores.

El ex secretario de la Sociedad Británica de Hipertensión Gordon McLnnes ha sugerdo que el aceite de pescado podría ser empleado para complementar algunos medicamentos. "Es una impresión general que el aceite de pescado es bueno para la protección cardiovascular", indica.