En declaraciones a Servimedia, Muñiz indicó que no le ha sorprendido la ruptura de las negociaciones pesqueras entre la UE y Marruecos. Explicó que en ocasiones anteriores nunca han tardado tanto en firmar el acuerdo pesquero, lo que"era un indicativo de que las cosas están cambiando seriamente y nos hacía prever las dificultades que tendríamos para renovar un futuro acuerdo".

Explicó que "Marruecos está desarrollando de una forma importante su flota industrial con ayudas comunitarias y con la participación de grandes empresas españolas y de otros estados comunitarios, por lo que era de prever que lo que pretende es reducir nuestra presencia para potenciar su propio sector extractivo".

Muñiz responsabilizó de la situación acual en que se encuentra la flota pesquera española al Gobierno central y a las comunidades autónomas que dependen en gran parte de la pesca, que en su día no quisieron realizar una reconversión del sector no traumática y gradual, incentivando la creación de industrias alternativas.

"Nosotros venimos advirtiendo desde hace más de 10 años al Gobierno español y a las comunidades autónomas que el modelo pesquero tradicional, que permitió el desarrollo de nuestra flota industrial en los años 60, ya no vale está caduco, pero no hicieron caso", explicó Muñiz.

CONVULSIONES SOCIALES

Para Muñíz, "seguimos dependiendo del sector primario ahora igual que hace 50 años, este es nuestro gran problema, mientras que otras flotas se han reconvertido gradualmente y hoy no tienen esos problemas". Ahora, según Muñiz, será necesario adoptar medidas traumáticas para reajustar la flota, lo que conllevará "convulsiones y una gran conflictividad social", de la que, a su juicio, no se puede culpar a los pescadores.

"sto es una traca de conflictos que se irá sucediendo en el futuro. Terminará lo de Marruecos, peor que mejor, y, seguramente, en dos meses volverá a surgir otro conflicto pesquero en otra área tradicional de pesca de nuestra flota", aseguró, al tiempo que dijo que la solución de buscar nuevos caladeros no es posible, ya que no les hay.

Indicó que por no haber hecho los ajustes necesarios en su momento y haber optado los gobernantes por la política de "pan para hoy y hambre para mañana", "ahora somos rhenes y no podemos prescindir del caladero de Marruecos", por lo que "hay que presionar como sea y agotar todos los esfuerzos diplomáticos y económicos".

Según el presidente de Aetinape, lo importante en estos momentos es que la UE apruebe el bloqueo económico y comercial contra Marruecos, y que el Gobierno español aproveche la presidencia comunitaria española para presionar.

Muñíz calificó de "valientes" las medidas anunciadas ayer por la comisaria de Pesca, Enma Bonino, contra Marruecos, pero tme que no serán aprobadas por el conjunto de la UE, porque dañarían otros intereses económicos que la UE y los distintos países comunitarios tienen en Marruecos.

Auguró un mal futuro para la flota española y dijo que "estamos asistiendo a su desmantelamiento". Recordó que en los últimos años los pescadores españoles han sido expulsados de muchas zonas de pesca, como los caladeros de Canadá, Estados Unidos, Namibia, Argentina y otras, y cifró en 32.000 los empleos que se han perdido en los últimos 8 añs en la pesca y la marina mercante española.