De acuerdo con estas fuentes, los minoristas comentaron esta mañana el asunto y expresaron su disconformidad con la denuncia, al entender que arece de fundamento y puede influir en los consumidores, que, alarmados por la advertencia y como medida de prevención, pueden dejar de comprar estos dos tipos de pescados en los próximos días, sin que existan razones objetivas para ello.

Roberto Domínguez, director de Mercamadrid, insistió en que la presencia de parásitos en las pescadillas y bacaladillas no supone ningún riesgo de carácter sanitario, siempre que el pescado sea lavado y eliminados los intestinos, medidas que, en su opinión, los pescaores se encargan de transmitir a los consumidores.

"Las acusaciones de IU son sensacionalistas y carecen de fundamento, y no han influido en los profesionales del sector, que hoy realizaron unas compras similares a las de otros días, precisamente porque son conscientes de de la falta de rigor de la denuncia. Ellos seguirán comprando pescadillas y bacaladillas porque saben lo que tienen que hacer", añadió Domínguez.

El responsable de Mercamadrid destacó, en tono irónico, que únicamente recuerda uncaso de intoxicación por consumo de pescado con parásitos, aunque en aquella ocasión se trató de un señor que, de una sentada, se comió 62 arenques crudos.

Tras señalar que hoy entraron en el mercado un total de 600.000 kilos de pescado, frente a los 800.000 de ayer -los martes es la jornada fuerte en el mercado de pescado-, Domínguez reiteró que Mercamadrid cuenta con un equipo de 6 inspectores veterianarios que trabajan diariamente en dos laboratorios, por lo que el control sanitario está garantizad.