Según informaron a Servimedia fuentes de la investigación del suceso, un pasajero "perturbado", armado con una navaja, lanzó amenazas de secuestro del aparato, cuando este comenzaba su aproximación al aeropuerto de Barajas.

El piloto del avión dio aviso de lo que estaba ocurriendo, por lo que un avión F-18 de la propia Base e Torrejón procedió a desviar el Airbus de Avianca a esta base militar, donde tomó tierra.

Nada más realizarse el aterrizaje, unidades de los GEO entraron el aparato, procediendo a desarmar al individuo y recuperar la normalidad.