Así consta en el informe ‘Un perfil de las personas mayores en España (2023): indicadores estadísticos básicos’ presentado este martes por el Departamento de Población del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el marco de la iniciativa ‘Envejecimiento en red’ en un acto que contó con la participación de Julio Pérez, autor del trabajo.

España cuenta con 9.479.010 personas mayores, un 19,97% de la población española, según la Estadística del Padrón Continuo del Instituto Nacional de Estadística (INE), con datos a 1 de enero de 2022. Se calcula que para 2040 podría haber más de 14,2 millones de personas mayores en España, un 27,4% de la población, que ascendería a 52 millones de habitantes, 4,5 millones más que ahora.

En este colectivo las mujeres son mayoritarias, superando en un 30,5% a los hombres; mientras que se observa que los octogenarios representan al 6% de la población, un segmento de la población que, según el informe, seguirá creciendo como consecuencia de “un proceso de sobreenvejecimiento cada vez más pronunciado”.

PENSIONES

El informe también tiene un apartado dedicado a las pensiones; en él se recogen datos de la Seguridad Social del pasado mes de mayo, según los cuales hay 10,02 millones de pensiones en España, siendo las de jubilación (6,34 millones) las más frecuentes, con un importe medio de 1.375 euros, seguidas de las de viudedad.

Un total de 1.015.588 personas mayores de 65 años viven en las ciudades más grandes de España, como Madrid y Barcelona, muchas más que en los municipios rurales, donde residen 762.446, a pesar de lo cual la proporción de este segmento de la población es superior en éstos últimos: 28,4%.

España es el cuarto país de la UE con mayor número de personas mayores en cifras absolutas: 9,5 millones. En cifras relativas, el país tiene una proporción de 20,1% de personas mayores, por debajo de la media de los 27, que se sitúa en el 21,1%.

El trabajo muestra cómo se ha ampliado la brecha de género durante el último siglo en España, como lo ilustra que las mujeres tienen una esperanza de vida de 85,83 años y los hombres de 80,27 años, siendo la media de 83,07. Estos guarismos sitúan a España como uno de los países con una de las esperanzas de vida más altas del mundo, a pesar del impacto que supuso la pandemia.

El trabajo también mide la calidad de vida de las personas mayores. En ese sentido, si se mide el porcentaje de tiempo que se vive en buena salud a partir de los 65 años, el contraste entre hombres y mujeres en España es evidente: en el caso de los hombres, el 55,7% del tiempo restante por vivir (10,7 años) lo pasan en buenas condiciones; un porcentaje que se reduce al 43,8% (10,3 años) entre las mujeres.

En cuanto a la morbilidad, más de la mitad de todas las hospitalizaciones son de personas mayores. De las estadísticas de defunciones por causa de muerte, se desliza que las tasas de mortalidad masculina superan a las femeninas en todas las edades, poniéndose de manifiesto que entre los mayores de 65 años las enfermedades del aparato circulatorio son las que tienen mayor incidencia.

DEPENDENCIA

Alrededor de 638.000 personas cuidan a dependientes mayores de 70 años dentro del hogar y 920.000 lo hacen fuera del mismo en España, siendo las mujeres las que se encargan particularmente de esta tarea, especialmente aquellas con edades comprendidas entre 50 y 59 años.

Las personas mayores, con independencia de su género, cuando cuidan lo hacen dedicando una alta cantidad de tiempo, como lo atestigua que más de dos tercios invierten más de una hora diaria al cuidado de otra persona.

El estudio también señala que durante la vejez, y a mayor edad, crece la probabilidad de vivir en soledad, fundamentalmente en el caso de las mujeres. España ha vivido durante las últimas décadas un incremento de los hogares unipersonales en mayores de 65 años, predominando la viudez como estado conyugal entre las mujeres a partir de los 77 años.

Por su parte, la proporción de personas que reconoce ser feliz siempre o la mayor parte del tiempo decae con la edad, siendo las mujeres las que declaran niveles más bajos de felicidad que los hombres, sobre todo en edades avanzadas. Prueba de ello, es que más de 1,7 millones de personas mayores de 70 años en España viven solas y son quienes registran niveles más bajos de felicidad.

El porcentaje de personas que dice ser feliz siempre o la mayor parte del tiempo disminuye con la edad. Las mujeres en España suelen declarar niveles más bajos de felicidad que los hombres, sobre todo en edades avanzadas. En total, más de 1,7 millones de personas mayores de 70 años en España viven solas y son quienes registran niveles más bajos de felicidad.