Jesús Gil impidió ayer el acceso a la prensa a sus lugares habituales de trabajo al partido Atlético-Tenerife, pues pide el pago de un canon para poder ejercer su función. Sin embargo, algunos periodistas consiguieron pasar al interior del estadio con una entrada y utilizar sus teléfonos inalámbricos para retransmitir el partido.

Para la AGP, la Liga y los clubes de fútbol disfrutan de un tratamiento fiscal peculiar, porque la sociedad considera que es una actividad relevante.

"No puede alegarse afirmó dicha asociación- su estructura como sociedades anónimas para justificar lo que en la práctica supone una censura económica que limita la cobertura informativa de dichas actividades.

Además, la AGP solicitó la intervención de oficio del fiscal por los incidentes del domingo.

Por su parte, la Asociación de la Prensa presentará una demanda contra la entidad que preside Jesús Gil por impedir la entrada en el estadio de los medios de comunicación.