Pérez Mariño aseguró que el acuerdo con CiU "tiene cosas positivas", pero agregó que"a la izquierda del PSOE está IU y hay que cuidar también estas actitudes". "No creo que haya que cambiar de novia, es decir, dejar a CiU como novia que uno tiene y pasar a otra, pero sí me parece que uno puede tener buenas relaciones con ambos a la vez sin que se produzca discordancia".

Para el diputado del PSOE, el hecho de que el Ejecutivo se haya cerrado "a una fórmula única es un error", ya que, a su juicio, "no se está haciendo un gobierno de coalición ni un pacto de legislatura, y por lo tanto,lo mejor es tratar caso por caso".

Pérez Mariño consideró que "la estabilidad no está reñida con cambiar de aliados para cuestiones concretas" y que "no hay que optar entre unos y otros, sino que hay que buscar fórmulas para que los acuerdos sean compatibles con ambos". En este sentido, puso como ejemplo la cuestión del aborto, y dijo que al PSOE le sería más fácil pactar con Izquierda Unida que con los nacionalistas, al tiempo que recordó que el PNV ya se ha mostrado en contra.

Sobre la posibiliad de que el Ejecutivo dé un giro a la izquierda, tras pedirlo algunos sectores socialistas, indicó que "hay que hacer una política diferente y, sobre todo, hay que cambiar la actitud ante la corrupción, no tener una actitud pasiva cuando estallan esos casos".

Para Pérez Mariño, que hizo estas declaraciones en Sitges (Barcelona), donde participa en los actos de la Universidad Técnica de Verano de Cataluña, después de las elecciones europeas del pasado día 12 "se ha puesto de manifiesto que hay un impotante descontento por parte de un sector del electorado socialista y, por lo tanto, tienen que haber modificaciones".