Fenadismer rechaza la tasa alemana "por su carácter discriminatorio y perjudicial para la competitividad de las exportaciones españolas y solicita a la Comisión Europea que investigue las compensaciones a los transportistas españoles".

Los pequeños transportistas rechazan que cada Estado europeo imponga de manera arbitraria un canon o tasa por el uso de sus infraestructuras, "lo que vulnera el principio de libre circulación de mercancías consagrado en el Tratado de la Unión Europea, y menos aún, que lo recaudado no sólo no se dedique a la mejora y realización de nuevas infraestructuras para la carretera, sino que se pretenda costear las infraestructuras ferroviarias".

Asimismo, Fenadismer considera que el peaje "es discriminatorio por cuanto dicha tasa exclusivamente va a ser pagada por los vehículos de transporte de más de 12 toneladas de peso máximo autorizado y no por los restantes vehículos que hacen uso de dicha infraestructura, y asimismo porque están previstas compensaciones a los transportistas alemanes, de las que no se beneficiarán los transportistas de terceros países".

Dicha medida perjudicará gravemente la competitividad de los productos españoles que se exportan a Europa, ya que cada viaje de ida y vuelva a Alemania tendrán un sobrecoste para el transportista español de unos 250 euros, según la federación.

Según datos oficiales, esta medida afectará a más de 377.000 desplazamientos anuales realizados por camiones españoles, lo que supondrá que contribuirán con más de 18 millones de euros anuales a la Hacienda alemana.