El presidente de la CEC, Luis Felipe Maestro, manifestó esta tarde en Madrid que en el nuevo decreto se han recoido "más favorablemente" las tesis de las grandes superficies que las de los pequeños comerciantes.

En este sentido, la confederación mostró su malestar porque no se haya aceptado sus últimas propuestas, que recogían una horquilla entre 5 y 10 festivos a determinar en las comunidades autónomas.

La confederación criticó el hecho de que, por el contrario, se haya establecido un mínimo de 8 aperturas, cifra que resulta "exageradamente alta" y, en contrapartida, no se haya fijado un tope máximo.

Según Luis Felipe Maestro, con el establecimiento de este mínimo de ocho aperturas en festivos se ha perjudicado la situación de las comunidades autónomas que, antes de la sentencia del Tribunal Constitucional, habían regualdo el horario comercial en torno a un máximo de cinco aperturas, como era el caso de Galicia, Valencia y Cataluña.

Por otra parte, la confederación considera que, al no haber concretado una cifra máxima de aperturas, el decreto deja a los comerciantes en "un compás de incertidumbre hasta el momento en que las comunidades autónomas regulen el número de festivos de apertura.

El presidente de la Confederación Española de Comercio manifestó que su organizacion ha recomendado a sus organizaciones establecer un primer contacto con las respectivas comunidades autónomas y, al mismo tiempo, convocar una reunión de las correspondientes juntas directivas en la primera quincena de enero para poder concretar y coordinar las actuaciones a desarrollar.

Maestro afirmó que "este decreto espositivo y es el principio de una mayor sensibilización del Ejecutivo con el problema de los pequeños y medianos comercios y que abre durante todo el año 1994 una posibilidad de discutir lo que será la Ley de Comercio donde se hable de los problemas reales del comercio".