Esta proposición de ley pretende que en los casos en los que el IPC real se sitúe por debajo del previsto no se descuente a los pensionistas lo que suban de más sus retribuciones del incremento del año iguiente, como contempla la nueva ley de pensiones.

Precisamente, esta situación se producirá este año, ya que la inflación real se situará casi con toda seguridad a finales de año por debajo de la prevista, pero el Gobierno ha decidido no detraer esta ganancia de poder adquisitivo del incremento de las pensiones del 98.

En opinión de Aparicio, que inauguró unas jornadas sobre fondos y planes de pensiones en Madrid, "no es bueno" modificar una ley cuando hace muy poco tiempo que se ha aprobado y,además, se ha aprobado con un amplio consenso político y social, en alusión a la nueva ley de pensiones.

"Ese texto ya tenía el necesario apoyo social y económico, que permite, además, introducir racionalidad y consolidar nuestro sistema de protección social. Yo creo que son cambios de actitud de carácter estrictamente oportunistas", dijo Aparicio sobre la proposición de ley del PSOE.