Sanmartín hizo esta reflexión después de conocer la existencia de un juego recreativo para niños que simula la pena de muerte en la silla eléctrica en Las almas de Gran Canaria y que ha sido retirado por el Gobierno regional tras ser criticado por medios de comunicación y organizaciones políticas y sociales.

El profesor Sanmartín dijo que este juego "es una mala enseñanza para los niños, a los que no tenemos que acostumbrar a divertirse con instrumento que deberíamos rechazar con todas nuestras fuerzas".

Añadió que los juegos o videojuegos conectados con la violencia "no son de temer sólo porque puedan inducir a los niños a comportamientos violento, sino porque lo insensibilizan ante la violencia".

Finalmente, Sanmartín acusó al Gobierno autónomo de "insensato" por haber permitido la instalación de este juego en una sala recreativa, aunque ahora lo haya retirado, al tiempo que lamentó que este incidente coincida en un momento en el que la sociedad española está pendiente de la suerte que pueda correr el español Joaquín José Martínez, que se encuentra en el 'corredor de la muerte' en Estados Unidos.