Varias asociaciones de vecinos de la isla tinerfeña han enviado comunicados a los medios de comunicación en los que deploran el racismo y afirman que en sus barrios existen excelentes relaciones entre payos y gitanos.

Los habitantes del barrio santacrucero de Añaza aseguran que sus relaciones son de respeto y perfecta armonía. La Asociación de Vecinos 8 de Marzo ha difundido un comunicado en el que afirma que la convivencia existente en él "e perfectamente equiparable a la de cualquier barrio de Santa Cruz de Tenerife, no conociéndose ningún tipo de agravios comparativos".

En su comunicado, la asociación expresa la solidaridad de esta barriada con los niños de Mancha Real (Jaén) y Aitona (Lérida) discriminados por el mero hecho de ser gitanos.

Además, instan a otras organizaciones vecinales a pronunciarse en este sentido, "porque quien arremete contra un niño no puede tener ningún tipo de justificación ante la sociedad".

Los gitnos ratificaron todos los extremos del comunicado. Según Angel Carmona Heredia, que llegó a Tenerife en 1955, "aparte de que la isla es hermosa, aquí hay buena gente, con la que es posible vivir en armonía y ser considerado como persona". Otro gitano, Miguel Carmona, declaró que "aquí nos sentimos como seres humanos.

Por su parte, el concejal de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Santa Cruz, Severiano Bermúdez, dijo que el trato a las familias de este polígono es igual para todas, "sea la familia ue sea". Agregó que a la hora de adjudicar viviendas "nunca hemos mirado la raza del solicitante, sino la necesidad planteada".