En relación al futuro de Euskadi, dijo, "lo primero que hace falta es que nos pongamos de acuerdo aquí en el País Vasco" y para ello no es necesaria "ninguna consulta" popular, "lo que hace falta es que el lehendakari levante el teléfono y convoque a los partidos políticos para una mesa y buscar el entendimiento".

"No lo ha hecho", sentenció López, "10 años (de gobierno) y no ha hecho esto. 10 años sólo para hacer dos preguntas, cuando lo que debería haber tenido es voluntad política, habría tenido que liderar el país convocándonos a las fuerzas democráticas para llegar al entendimiento".

En cambio "ha preferido buscar la confrontación y la división. Es tremendo decirlo así, pero es verdad", aseguró el líder de los socialistas vascos.

Sobre el traspaso de las competencias pendientes, López se manifestó partidario de que los gobiernos central y autonómico "se sienten a negociar" para acordar en qué términos se realizan las transferencias.

Puntualizó, no obstante, que algunas de las materias pendientes de traspaso no están en manos del Gobierno vasco por la negativa de las autoridades autonómicas a negociar.

En ese sentido dijo que "no se pueden reclamar transferencias cuando se certifica la defunción del Estatuto. No se puede demoler el edificio y pedir al tiempo que se nos paguen los muebles nuevos del salón".

Por su parte, el portavoz del PSE, Rodolfo Ares, dijo que los socialistas están esperando conocer la opinión del presidente del PNV, Íñigo Urkullu, sobre una convocatoria de consulta que no deja explícito el "rechazo inequívoco" a la violencia terrorista, tal y como había prometido el lehendakari.