EDUCACIÓN

LA PATRONAL CECE ABOGA POR "ROBUSTECER LA AUTORIDAD DEL PROFESOR"

- Elabora un decálogo para mejorar la convivencia en los centros escolares

MADRID
SERVIMEDIA

La Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE) ha elaborado un decálogo con el que pretende mejorar la convivencia escolar y aportar soluciones a los problemas cotidianos de convivencia y violencia a los que se enfrentan cada vez más centros educativos.

El decálogo se presentará mañana con motivo de la jornada sobre "Convivencia en la Escuela" que ha organizado la CECE, en la que participarán la catedrática de Psicología de la Educación de la Universidad Complutense de Madrid María José Díaz-Aguado y el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, Pedro Núñez Morgades, entre otros expertos.

Según informó la citada patronal de centros de enseñanza, "robustecer la autoridad del profesor y prestigiar su figura ante los alumnos" es uno de los principales puntos del decálogo.

La presidenta de la confederación, Isabel Bazo, aseguró hoy que hay que recuperar la dignidad del profesor, robusteciendo su autoridad, aunque la familia también tiene que poner de su parte.

"Por falta de tiempo la familia deja toda la responsabilidad a la escuela, pero lo que hay que hacer es reflexionar sobre el hecho de que la educación en la escuela es complementaria a la que se da en casa", apuntó.

Además, Bazo destacó que "la figura del profesor está infravalorada por la propia Administración", que en ocasiones desautoriza al docente cuando cuestiona sanciones impuestas a los alumnos.

Entre las medidas encaminadas a robustecer la figura del profesor, el director de técnicas educativas de la CECE, Mariano del Castillo, apuntó la necesidad de que "se mantenga lo que diga el profesor y que el profesor ponga las notas solo, no sometiéndolas al resto de profesores". "Además", agregó, "es muy importante que el propio centro educativo respalde las decisiones del profesor".

En el decálogo se apunta también la necesidad de promover unas relaciones más estrechas entre las familias y los centros educativos, con el fin de actuar con coherencia en la educación de los menores. "Es importante una cohesión entre la familia y la escuela", apuntó Del Castillo.

Bazo insistió en la necesidad de aplicar sanciones a los alumnos en el mismo momento en que se producen los hechos merecedores de ellas, ya que aplicar las sanciones pasadas unas semanas no es eficiente para la educación del alumno.

(SERVIMEDIA)
02 Oct 2006
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