El responsable del Patrimonio señaló que la onda expansiva rompió unos 15 cristales de ventana de la fachada que da a la calle Bailén, correspondientes a despachos e instancias administrativas principalmente. También se vió afectado por rotura de algún cristal el Convento de la Encrnación, igualmente del Patrimonio Nacional, en la fachada que da a la plaza de Oriente.

La explosión rompió también alguna falleba (varilla de hierro que sirve para cerrar las ventanas). Las habitaciones sufrieron asimismo "mucha vibración" con motivo del estruendo, que tiró varios objetos de las mesas y alarmó al personal de palacio.

Los despachos de los servicios de restauración y arquitectura, la propia secretaría general, los despachos de personal, suministros, son las dependencias más afectdas. También hay una rotura de cristal en una zona de caballerizas que da a los Jardines de Sabatini, en distinta fachada.

En conjunto, los desperfectos no sobrepasan las 100.000 pesetas, estimó el secretario general del PN, salvo que posteriormente se descubran otras secuelas ocultas del atentado, por lo que la reparación de cristales y demás materiales será realizada por el servicio de mantenimiento del Patrimonio Nacional, indicó José Luis García.

Los servicios del Ayuntamiento de Madrid se ofecieron esta mañana para subsanar los daños del Palacio Real, pero "como son daños poco significativos", señaló García, "no me parece tan importante ni significativo como para hacer un reembolso de gastos con cargo al Ministerio del Interior".

El secretario general expresó el susto de los empleados del Palacio por el atentado de ETA, ya que la plaza de Ramales y calles adyacentes forman parte del itinerario que une su puesto de trabajo y su domicilio. De haber tenido lugar la explosión a las 8,15 de l mañana, con mucha facilidad habría figurado algún funcionario del Palacio Real entre las víctimas, destacó José Luis García.