UN PARLAMENTARIO FORAL DE HB ENCARCELADO ACUDE VESTIDO CON UNA MANTA AL TSJ DE NAVARRA PARA SER JUZGADO POR INSUMIION

PAMPLONA
SERVIMEDIA

El parlamentario foral de Herri Batasuna Jaime Iribarren, preso en la cárcel de Pamplona por un delito de incendio, acudió hoy ante el Tribunal Superior de Justicia de Navarra para ser juzgado como insumiso, cubierto con una manta y sin otra prenda de vestir que sus calzoncillos.

La "huelga de frío" de este recluso forma parte de la campaña de los presos insumisos de Pamplona para mostrar su rechazo al castigo que el nuevo Código Penal estipula para la negatia a realizar el servicio militar o la PSS, que es la inhabilitación absoluta de 8 a 14 años para ejercer cargos o puestos públicos.

Iribarren fue trasladado desde la cárcel al Palacio de Justicia por efectivos de la Policía Nacional, dado que permanece preso desde hace más de dos meses por un delito de incendio.

El pasado mes de febrero, el Tribunal Supremo confirmó una anterior sentencia de la Adiencia Nacional por la que el ahora parlamentario fue condenado a 18 meses como autor del incendio deuna maquina que trabajaba en las obras de la Autovía de Leizarán.

En esta ocasión, Iribarren se enfrenta a una petición fiscal de 2 años, 4 meses y un día de cárcel por haberse negado en 1993 a realizar el servicio militar. El TSJ de Navarra, encargado de juzgarle por su condición de aforado, ha visto por vez primera un delito de estas características que, en decenas de ocasiones anteriores, han llevado los juzgados de lo Penal de la Comunidad Foral.

El dirigente de HB no quiso responder a ningun de las preguntas que se le pretendían formular, con el argumento de que fue llevado ante los jueces en contra de su voluntad y porque "este tribunal no puede juzgar ni mi conciencia ni mis ideas políticas".

Mientras que para el fiscal, Jaime Iribarren incumplió la ley al no incorporarse al Ejército, su defensa -ejercida por el también parlamentario foral de HB Adolfo Araiz- aseguró que nadie puede juzgar las ideas de otra persona ni, por tanto, castigarlas. Tras demandar por ello la libre absolución e su cliente, añadió que el tribunal ha de ser sensible ante una "ley injusta" y una realidad social que la rechaza.

(SERVIMEDIA)
21 Mayo 1996
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